Mirando en tu abismo

"¿Qué habrá pasado ayer?" me pregunté. Regrese moribundo a mi casa y casi borracho la noche anterior,. Gracias a eso me gane un castigo de no poder salir por unas cuantas semanas.

Aparte del castigo no la estaba pasando muy bien, me dolia muy fuerte la cabeza. Le dije a mi mamá si me podia dar una pastilla pero me dijo que no. Ella no me iba a dar nada porque decia que era mi culpa por haber llegado asi.

Decidí mejor ir a comprar la pastilla por mi cuenta. Tomé 7 soles y fui a una farmacia que estaba cerca de mi casa.

Para ir a esa farmacia debía cruzar un parque. De camino casi me caigo por la culpa de una grada, por suerte nadie me vio tropezar. Al llegar pedí una pastilla para el dolor de cabeza, el señor me dijo dos nombres, yo escogí el segundo (el cual no recuerdo muy bien cual era).

Antes de llegar a mi casa me acordé de que mi mamá siempre toma las pastillas con coca-cola, ella dice que así le hacen efecto, verdad o no mi cabeza estaba explotando y tenia que intentarlo.

Fui a un quiosco y pedí una coca-cola de medio litro sin helar, no recuerdo cuanto me cobraron pero después de que me entregaran la botella volteé, di unos cuantos pasos para despues abrirla y en la cuadra paralela donde me encontraba la vi a otra vez. Otra vez ella no estaba sola; estaba acompañada de un tipo. Me la quedé mirando por unos segundos y pensé que mejor era voltear y hacerme el "loco".

Me dirigí hacia mi casa mientras tomaba un poco de la coca-cola. Curiosamente a la vez que bebía me di cuenta de algo; ya no sentía nada. Ni un cosquilleo, ni pena, ni amor, ni tristeza, ni empatía, ni alegría, simplemente nada.

Un poco triste que esta historia haya terminado así, pero supongo que así son las historias de la vida real.

Eso sí, esto me dejó una lección; A veces nosotros los humanos cada vez nos esforzamos más para no quedarnos solos.

Desde hace miles de años con las prostitutas o ahora con internet. Nosotros, las personas nos estamos esforzando para evitar estar solos.

No lo digo del tema sentimental, lo digo literalmente el "estar solos". Solo tu y tu inconsciente, sin interrupciones de nada, ni sonidos de que has recibido un mensaje o sonidos organizados con letras de sexo. Como dije hace un momento "solo tu y tu inconsciente".

Todos los años la humanidad se esfuerza cada vez más y más para no poder quedarnos solos, para no poder hablar con nosotros. Pero esto es tan importante como lavarse los dientes todos los días para nuestra salud bucal, ya que hablar con nosotros mismos es para nuestra salud mental.

No solo salud mental, sino también para conocernos y saber si lo que estamos haciendo está bien o mal.

Lamentablemente hemos llegado al punto de tenernos miedo de nosotros mismos y no intentar hablarnos para no mirar el abismo que tenemos en nuestro interior. Ese abismo que nos está atormentando todos los dias y a la que llamamos "conciencia".

Evitamos cruzar este abismo tomando rutas como el alcohol, videojuegos, música, rezos o mujeres/hombres .

Qué mejor que estar solo, literalmente solo para poder pelear con ese "Digett del abismo" y mostrar quien manda aquí. Para poder conseguir esa danza tan hermosa del equilibrio de lo infinito con lo finito.

A veces es bueno ir al baño a cagar sin el celular, aprovechar esos momentos "aburridos" en los que estás contigo mismo para pensar en ¿Quien eres? o ¿Quien quieres ser?.

Así poderte autoresponder y pensar si lo que somos de verdad es lo que queremos o que si lo que queremos de verdad es lo que deseamos o si lo que deseamos es en verdad lo que hacemos.

Qué mejor que tú seas el protagonista de tu propia historia y no el antagonista. Y si llega a ver un antagonista que solo sea la muerte, un humano no necesita odiar a otro ser humano para hacerlo sentir mal, la vida de por sí ya es mala, no necesita la ayuda de otros para volverla peor.

Toma de la mano a tus enemigos y diles que los quieres, abraza a tus amigos y diles que los amas. Debi acercarme a la cuadra paralela donde estaba antes para abrazarlos y desearles buena suerte...

Los humanos debemos hablar con nosotros mismos para ser cada vez mejores.

¿Pero qué pasaría si llegamos a dominar el abismo?

Yo no lo e echo, cada vez que bajo a ese abismo regreso corrupto sin aun dominarlo. Pero hace varios años en la búsqueda del superhombre un hombre llamado "Nietzsche" lo intentó, y lamentablemente terminó loco a los 40.